
Fuente: SIGRAUTO/AEDRA
Ernesto Salas, nuevo Presidente de SIGRUTO, responde en una charla a nuestras preguntas, introduciéndonos en su figura y trayectoria, pero sobre todo valorando la marcha del sector de los vehículos al final de su vida útil y su reciclaje, dentro de la cada vez más pujante economía circular, y su futuro.
PREGUNTA – ¿Cuál es su trayectoria profesional y cómo era su relación previa con SIGRAUTO?
RESPUESTA – He desarrollado prácticamente toda mi carrera profesional en Renault España, donde he trabajado durante 33 años. En el año 2006 fui nombrado Director de Relaciones Institucionales, cargo que ocupé hasta dejar el Grupo Renault en 2022. También fui profesor de la Escuela de Ingenieros Industriales de ICAI durante 10 años. En este tiempo he ostentado, entre otros cargos, el de vicepresidente del Cluster de Automoción de Castilla y León (FACYL), el de vicepresidente del Consejo Social de la Universidad de Valladolid y el de Director de la Fundación Renault para la Movilidad Sostenible
Tengo relación con SIGRAUTO desde antes incluso que se constituyese en el año 2002 ya que, a mediados de los 90, justamente cuando la normativa europea se estaba empezando a desarrollar, era el responsable de los asuntos relativos a los vehículos al final de su vida útil en Renault y participé representando a España en el Grupo de Trabajo que a tal efecto se creó en ACEA. De hecho estuve muy involucrado en el proceso de constitución de SIGRAUTO que se gestó en distintas reuniones entre AEDRA, ANFAC, ANIACAM y FER. En todos estos años en el seno de Renault he tenido también muchos momentos y etapas en las que he tenido que involucrarme más en aspectos ligados a los vehículos al final de su vida útil y por ello conozco bien la labor que desarrolla SIGRAUTO.
P – ¿Puede darnos una visión general sobre el papel que desempeña o que debe jugar SIGRAUTO en el futuro?
R- SIGRAUTO ha jugado un papel muy importante desde su constitución al ser una entidad en la que están representados todos los eslabones de la cadena de tratamiento de los vehículos al final de su vida útil; es decir los productores (fabricantes e importadores), los Centros Autorizados de Tratamiento (CATs) y las instalaciones de fragmentación y postfragmentación.
Gracias a la coordinación y a la colaboración entre estos sectores, se ha logrado situar a España a la cabeza de la Unión Europea en este ámbito, ya que no solo contamos con la normativa más avanzada y efectiva de toda la UE sino que contamos con posiblemente las instalaciones de tratamiento de vehículos al final de su vida útil más sofisticadas.
SIGRAUTO actúa en todos los ámbitos desde el desarrollo de las normativas que regulan el sector, trasladando la postura del sector en su conjunto, el apoyo técnico y legal a las empresas que forman parte de los sectores representados, la búsqueda de nuevas vías de recuperación de materiales para mejorar los niveles de recuperación, la propia medición de los niveles de recuperación que se alcanzan, la divulgación y la comunicación de todos los aspectos relevantes del sector, la persecución de la competencia desleal, etc.
En el futuro SIGRAUTO seguirá siendo un pilar fundamental para el desarrollo del sector y tendrá un papel muy importante en el proceso de elaboración del futuro Reglamento Europeo sobre vehículos al final de su vida útil trasladando la opinión conjunta del sector en España y posteriormente en la implantación de todas las medidas que el Reglamento establezca.
P – En los tiempos que corren, con tanto cambio legislativo, tendencias… ¿cómo ve el sector en su conjunto? Hablamos de CATs, de Economía Circular…
R – Es verdad que el sector ha sufrido importantes cambios normativos en los últimos años ya que, mientras que el marco normativo europeo no ha sufrido ningún cambio, en España, tras la transposición en el año 2003 a través del Real Decreto 1383/2002, se han publicado dos Reales Decretos, uno en 2017 y el segundo, y actualmente en vigor, en 2021. Pero gracias en parte al trabajo de SIGRAUTO, y sobre todo de los sectores que representa, la normativa actual es la más avanzada de Europa evitando los principales problemas que actualmente existen en el entorno europeo. De esta forma, en España contamos con el mejor sistema de tramitación de bajas de toda la UE que garantiza que todos los vehículos acaben en instalaciones de tratamiento autorizadas y sean sometidos a un correcto tratamiento medioambiental, cuando en gran parte de Europa se estima que un 50% de los vehículos terminan en “paradero desconocido”. Además, estamos hablando no sólo de turismos y vehículos comerciales ligeros (que es el ámbito de aplicación de la Directiva), sino que en España esto ocurre con todos los tipos de vehículos que es uno de los objetivos que persigue el futuro Reglamento Europeo.
El automóvil es un paradigma de economía circular. Si alguien quiere un ejemplo de qué es economía circular, ahí lo tiene. Y está presente silenciosamente desde hace décadas. El automóvil está diseñado pensando en su reparabilidad y durabilidad y prueba de ello es que existen alrededor de 50.000 talleres de reparación en nuestro país y que los vehículos llegan al final de su vida útil con una edad media de 20 años. Además, a pesar de tratarse de un producto muy complejo, de los vehículos se recupera aproximadamente el 95% en peso de sus materiales, lo que sin duda es algo más que reseñable, muy superior a lo alcanzado por productos más sencillos. Creo que esto es un logro que no se valora lo suficiente. Por otra parte, hay que destacar que España reporta cifras de recuperación fiables a la UE gracias a la labor de SIGRAUTO, mientras que otros países dan unas cifras sencillamente imposibles de creer.
P – ¿Y cómo ve el futuro?
R – Sin duda el futuro nos va a traer nuevos retos. Empezando por las nuevas exigencias que es posible que incorpore el nuevo Reglamento. Cómo no, también la gestión de los vehículos electrificados supondrá nuevos retos, aunque nuestras estimaciones apuntan a que en el año 2030 este tipo de vehículos solo supondrán el 5% del total de los tratados por los CATs. Cabe destacar que en España estamos haciendo los deberes y ya se ha establecido la formación que deben tener los trabajadores de los CATs que manipulen este tipo de vehículos y más de 100 CATs cuentan ya con algún trabajador con la certificación personal necesaria.
P – SIGRAUTO, ¿tiene los medios adecuados para afrontar los retos y cambios que están por venir?
R – SIGRAUTO tiene hoy los medios adecuados para realizar las labores que define nuestra Junta Directiva. Lógicamente, si estas labores requieren de mayores medios nos dotaremos de ellos.
P – Por último, ¿cómo es la relación entre los miembros de SIGRAUTO?
R – SIGRAUTO participa en muchos foros internacionales sobre gestión de vehículos al final de su vida útil y en ellos suele sorprender el marco de colaboración que se hemos logrado establecer en nuestro seno entre sectores tan distintos y con intereses tan dispares como marcas automovilísticas, CATs e instalaciones de fragmentación y postfragmentación. Pero al fin y al cabo son los eslabones necesarios de una cadena de valor. La clave del éxito ha sido haber entendido y comprobado que la búsqueda de un equilibrio entre las posturas de los distintos agentes da mejores resultados que el enfrentamiento. En estos más de 20 años de trabajo conjunto, los sectores representados en SIGRAUTO han trabajado con ese espíritu y, a pesar de las dificultades, siempre se ha logrado encontrar ese equilibrio que permitía avanzar y resolver los problemas mediante soluciones con las que todos se encontrasen más o menos cómodos y siempre respetando las leyes de competencia. No quisiera desaprovechar la oportunidad de destacar el papel desempeñado durante los últimos 15 años por Carlos Mataix como facilitador de consensos desde la presidencia de SIGRAUTO.