Fuente: GranadaHoy.com
En muchos tipos de coches, también cuando acumiulan muchos km, los repuestos procedentes de CAT pueden su salvación, ya que por poco dinero quedan listos para circular durante más tiempo, evitando tener que buscar un coche nuevo o de segunda mano.
Encontrar recambios de desguace no siempre es fácil, sobre todo si nuestro vehículo no ha estado entre los más vendidos. Es factible conseguir una bomba inyectora de un Ibiza TDI, pero no tanto el airbag de un Honda Jazz o similares.
Por suerte, hay multitud de páginas web especialezadas, muchas pertenecientes a CATs, donde localizar localizar y pedir recambios e incluso presupuestos.
Una vez nos contesten con la estimación del precio, y si estamos de acuerdo, podemos recibir la pieza en uno o dos días, en casa o en nuestro taller mecánico de confianza para que nos reparen el vehículo.
Motores de CATs
Si es complicado dar con algunas piezas en un desguace, qué decir de un motor. No se suelen romper, pero si lo hacen la reparación es cara porque uno nuevo tiene un coste prohibitivo. De hecho, si no fuera por los propulsores de CAT muchos vehículos terminarían en estos tras una avería grave y costosa.
Por suerte, ahora incluso se puede incluso comprar un motor desde casa, sentados en nuestro ordenador y eligiendo el que más encaje con el presupuesto, de nuevo para recibirlo en nuestro hogar o en el taller en el que se instalará.
Tienen garantía y están verificados por profesionales, de manera que podemos confiar en que al colocarlos no darán problemas, permitiéndonos hacer muchos miles de km con ellos y alargando todo lo posible la vida de un coche que de otra manera terminaría en el propio CAT.
Es cierto que el cambio de motor no es algo al alcance de cualquiera, por lo que hay que ir a un taller mecánico, donde el precio de la mano de obra encarecerá la operación. Con todo, la suma del importe de la compra del motor de segunda mano y el del trabajo ni siquiera llegará a lo que cuesta un motor nuevo, que luego habría que colocar igualmente.
Ahorro evidente
El ahorro es muy evidente, alrededor de un 50 % si ponemos una mecánica usada (depende del modelo de coche que tengamos), por lo que con la garantía del desguace es una operación rentable.
A veces, el problema es encontrar dónde montar un motor de segunda mano. No todos los mecánicos quieren hacerlo, de forma que en ocasiones las mismas webs que nos venden el motor ofrecen el servicio.
Internet ha llegado al mundo de los desguaces, por lo que ahora podemos comprar todos los recambios usados que necesitemos desde casa, sin tener que patear campas llenas de coches ni desmontar piezas por nuestra cuenta, como sucedía hasta no hace tanto.