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Retrovisor interior digital del Range Rover Evoque

Fuente: Motociclismo

Ya sea porque se tiene una moto vieja que no está para rodar o por haber adquirido un nuevo modelo y es necesario desprenderse del antiguo, se puede dar la circunstancia de que haya que dar de baja a una moto.

En ese caso, hay algunos puntos interesantes a tener presentes para que el proceso no sea engorroso y se lleve a cabo con la mayor ligereza posible.

Dónde hacerlo

Esta es quizás la primera cuestión que cualquier dueño de una motocicleta antigua se hace y la respuestas es tan sencilla como acudir a la Jefatura de Tráfico Provincial. Pero de igual modo se puede acudir a un Centro Autorizado de Tratamiento de Vehículos y realizar los trámites allí.

En Tráfico hay que solicitar cita previa, más aún hoy en día con las restricciones que hay en los edificios públicos por causa de la pandemia de coronavirus.

Documentación necesaria

Como en cualquier trámite que se quiera llevar a cabo, hará faltalna documentación que identifique tanto al dueño como a la moto en sí, así como la capacidad para poder darla de baja.

La solicitud pertinente se podrá pedir en la Jefatura o en los CATs. Como cabe suponer, habrá que llevar NIF o identificación fiscal en caso de que el vehículo pertenezca a una empresa u organización. Asimismo, será necesario el permiso de circulación y la tarjeta de control de la Inspección Técnica del Vehículo.

En este punto hay que mencionar que si se da de baja una moto porque haya sido robada, el dueño de la misma deberá llevar una denuncia de ese hecho para poder finiquitar el proceso.

El trámite conlleva unos costes en la DGT (menos de 10 €), de manera que habrá que abonarlos con una tarjeta de crédito o de débito, ya que no se admiten pagos en metálico. Claro que si se lleva la moto a un CAT el dueño se evita tener que realizar ese trámite y corre el propio centro con el coste.

Traslado a otro país

Si el dueño de la motocicleta cambia de residencia y se traslada a vivir a otro país puede sueceder que en la mudanza se lleve la moto. Entonces deberá darla de baja en la DGT para después darla de alta en la nueva localización.

Requiere la solicitud de baja debidamente cumplimentada y un anexo exponiendo que la moto se lleva a un país que no pertenece a la Unión Europea. A todo ello se añade la documentación del vehículo y la documentación fiscal.