
Fuente: 20 Minutos
Al Gobierno de Filipinas no le tiembla el pulso pra actuar ni demostrar lo que es capaz en la lucha contra el tráfico y contrabando de coches de lujo. Armados con una excavadora, los trabajadores del Bureau of Customs (el departamento de importaciones y aduanas) han destrozado una cantidad cercana al millón de euros en superdeportivos de lujo que no cumplían con las normas y requisitos de importaciones del Gobierno.
Este era aproximadamente el coste de los 21 vehículos de alta gama que habían sido introducidos de manera ilegal en el país, que al cambio suponían unos 58,55 millones de pesos filipinos. En Filipinas, el precio de los impuestos que se han de pagar por cierto tipo de importaciones alcanza casi la mitad del bien importado, por lo que propietarios y contrabandistas buscan cualquier modo viable de colar coches así en el país.
Piezas únicas
Los deportivos han sido achatarrados en el puerto de Manila y en el de Cagayan, como ha publicitado del BOCP desde su web. Algunos de los modelos más destacados de la colección eran un Lotus Elise, un Mercedes-Benz SLK, un Porsche 911 C2S o un Bentley Flying Spur. Se puede ‘apreciar’ el destrozo provocado por las excavadoras en un vídeo de la cadena de informativos de Filipinas.
Pero el modelo cuya demolición ha llegado a doler más a los aficionados (y al dueño que lo hubiera importado) que han observado el trabajo destructivo de la excavadora ha sido el McLaren 620R, un deportivo de competición valorado en 330.000 € y del que solo existen 350 unidades en todo el mundo, aunque ahora está cifra quede en 349.